Marie-Josée Croze

Filmografía seleccionada

2007 JE L’AIMAIS
Zabou Breitman
LE NOUVEAU PROTOCOLE
de Thomas Vincent
DEJAD DE QUERERME
de Jean Becker
2006 LA ESCAFANDRA Y LA MARIPOSA
de Julien Schnabel
2005 MUNICH
de Steven Spielberg
2003 ORDO
de Laurence Ferreira Barbosa
MENSONGES ET TRAHISONS
de Laurent Tirard
LAS INVASIONES BÁRBARAS
de Denys Arcand
(Premio de Interpretación, Festival de Cannes 2003)
ASCENSION
de Karim Hussain
2002 ARARAT
de Atom Egoyan

Quería el papel de Cécile, ¿cómo lo consiguió?
Nunca había hecho algo así antes. Un amigo ayudante de dirección, que había trabajado en la anterior película de Jean, me habló del proyecto de DEJAD DE QUERERME, diciéndome que era increíble y que debía leerlo como fuera. Mi agente se puso en contacto con el productor Louis Becker y este me mandó el guión. Me emocioné en cuanto lo leí. Recuerdo que me impresionó la larga escena de la pelea. Era necesario no caer en los clichés típicos de la televisión, que suelen estar a mil leguas de lo que pasa en la vida real. Luego me reuní brevemente con Jean Becker, que me ofreció su confianza y el papel.

¿Fue difícil rodar con él?
Jean sabe exactamente lo que quiere. Si todo va bien, lo dice, y si no va bien, todos lo sabemos enseguida. No se calla, manifiesta sus dudas, sus inquietudes. No hace trampas nunca. Es un hombre sincero y directo. Sabe estar para que los actores se sientan cómodos en todo momento. En lo que a mí respecta, tuve la sensación de que siempre estaba conmigo, y eso tranquiliza mucho.

¿Qué le gusta del cine de Jean Becker?
Está Verano asesino, claro, y también otras películas que me gustaron a pesar de que no me atraía el tema. Pero aunque no guste el universo de Jean Becker, es imposible resistirse a sus personajes por su enorme sinceridad. No cabe la menor duda acerca de la sinceridad del cine de Jean Becker.

¿Cómo ha sido trabajar con Albert Dupontel?
Es la segunda vez que rodamos juntos. No diré que conozco a Albert, es un solitario, es muy púdico, pero este distanciamiento me conviene. Nos permite estar mucho más cerca cuando suena la palabra “acción”. Creo que es necesario salvaguardar cierta admiración y reservarla para la cámara. Pasa lo mismo cuando memorizo los textos. Nunca los grabo de antemano, lo que me permite decirlos de forma inesperada cuando ruedo. Estoy convencida de que esta espontaneidad se nota en la pantalla.

El personaje de Cécile es muy sutil, muy comedido, ¿qué le parece?
Con su marido forman una pareja que se ama con un amor de fusión. No puede creerse lo que está pasando. No lo entiende. Reflexioné mucho acerca de la relación de Marianne y Johan en Secretos de un matrimonio, de Ingmar Bergman.

¿Qué recordará de este rodaje?
He sido muy feliz en este rodaje. Feliz de compartir escenas con grandes actores, feliz de participar en una película que me parece importante para Jean Becker. DEJAD DE QUERERME es como un grito; desprende una urgencia muy conmovedora.